Si existiese una lista de los vehículos más extraños jamás construidos (y quizás exista), sin duda el «Tsar Tank», «Tanque del Zar» o «Tanque Lebedenko» se encontraría en los primeros puestos. Su nombre proviene del ingeniero que ideó, diseñó y construyó esta máquina bélica, N. Lebedenko que trabajaba en 1914 para una empresa privada encargada de diseñar la artillería del ejército ruso.

Tanque del Zar Lebedenko

Su diseño era revolucionario. Una máquina jamás vista, del tamaño de una casa. que sin duda provocaría el terror en el campo de batalla incluso entre los más aguerridos enemigos. El problema era que su eficacia estaba por demostrar. No dejaba de ser una idea novedosa sobre un papel, así que, ¿cómo conseguir financiación para semejante proyecto? La respuesta era sencilla: recurrir al hombre más poderoso del país, el Zar Nicolás II
Con las esperanzas puestas en convencer al Zar se fabricó un modelo a escala con el motor de un gramófono y se le presentó al mandatario. Para la demostración se construyó un circuito con obstáculos a escala, los cuales no fueron barrera para el «tanque Lebedenko». La demostración fue todo un éxito, el Zar quedó tan impresionado que accedió enseguida a financiar el proyecto.

Pronto comenzó la fabricación del primer carro de combate y, a finales de 1915, la construcción de este prototipo estaba finalizada. Las ruedas delanteras tenían nueve metros de diámetro y la triple rueda trasera metro y medio. En total medía casi 18 metros de largo y 12 metros de ancho y pesaba 60 toneladas. Necesitaba dos motores de 240 CV colocados en cada una de las grandes ruedas delanteras para moverse a una velocidad máxima de 17 Km/h. La tripulación estaba formada por diez hombres con un armamento formado por diez cañones distribuidos en tres torretas.


El primer día de pruebas, en un campo a 60 km. de Moscú, se hicieron realidad los peores presagios. Los obstáculos que no suponían dificultad en el modelo a escala (como muros de poca altura) se tornaban infranqueables para el prototipo real, y en los intentos campo a través quedaba irremediablemente hundido en el fango (debido, entre otras cosas, a que su peso había sido calculado en 40 toneladas y no en 60). La última de las dos unidades fabricadas fue desmatelada en 1923. Otro tipo de carros de combate dominarían los campos de batalla del siglo XX.

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1 comentarios:

  1. ¡Cosa rara el tanque este! Por no decir que parece que podría dispararse a sus propias ruedas.

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